La mejor fiesta de fin de curso para dar la bienvenida al verano
Si hay una reina entre las fiestas infantiles, ésta es la fiesta de fin de curso. La madre de todas las fiestas, la fiesta en la que los niños dicen adiós a los libros, los deberes y las clases para dar paso al verano, la piscina y las vacaciones.
Por eso, la fiesta de fin de curso debe ser una acontecimiento único y maravilloso para que los niños entren con buen pie en su tan merecido descanso veraniego. Además, lo más seguro es que se tengan que despedir de compañeros y de profesores que no volverán a ver hasta septiembre, así que hay que intentar que esta despedida sea lo más divertida posible.
Pues bien, lo primero a tener en cuenta a la hora de organizar una fiesta de fin de curso es que vas a crear un acontecimiento para muy diversas edades, así que lo mejor es que dispongas de distintas actividades y atracciones destinadas a cada uno de los distintos grupos de niños que habrán.
¿Qué elegir para una fiesta de fin de curso?
Primeramente, cuenta con unos monitores especializados en ocio infantil al aire libre, para que profesores y padres puedan disfrutar de la fiesta al igual que los alumnos. Evitarás turnos de vigilancia y podrás quedarte tranquilo porque habrá alguien apropiado que cuide de los más pequeños.
Realiza talleres para que los niños se entretengan haciendo manualidades o pintándose la cara. Estas actividades son muy entretenidas para los niños y además les ayudan a desarrollar su creatividad.
Alquila varios hinchables, ya sean toboganes, castillos o un combo que tenga de todo. Lo ideal es que adquieras unos cuantos que se adecuen a las distintas edades de los alumnos, así evitarás que los mayores molesten a los más pequeños y que además se sientan importantes porque cada uno tiene una atracción distinta.
En una buena fiesta de fin de curso no puede faltar un escenario con un karaoke, a los niños y a los no tan niños les encanta cantar y demostrar sus virtudes como cantantes, además crearás un momento muy divertido entre, padres, profesores y alumnos.
Las atracciones mecánicas como el toro mecánico o los miniquads, son el ingrediente perfecto para una fiesta de fin de curso, además de que se lo pasarán en grande y disfrutarán como si no existiese mañana, les recordarás las normas de convivencia con el resto de niños, como tener que esperar su turno o la importancia de saber perder o ganar en una competición.
La comida y los dulces son imprescindibles, por supuesto que tienes que preparar una gran merienda que les de fuerza y energía para saltar y reír en todas las actividades que les has preparado, pero también estaría bien algún puesto de algodón o de palomitas que a los niños les encantan y sirva como premio por su gran trabajo a lo largo de todo el año.