La importancia del juego para los niños
El juego es imprescindible para el desarrollo de tus hijos, da igual que sea jugar a fútbol, jugar a las muñecas o jugar al supermercado, el juego es un entretenimiento y a la vez una obligación.
El juego es un momento de diversión, pero también de desarrollo y de educación de tu hijo.
Los adultos podéis averiguar las inquietudes, los deseos y la personalidad de vuestros hijos, además podréis enseñarle vuestros valores y crear un lazo entre padre e hijo que será muy difícil de quebrantar.
Para los peques es una experiencia única a través de la cual se desarrollarán, aprenderán y potenciarán sus habilidades.
Además, a través del juego no sólo estará aprendiendo, sino que también estará produciendo una salud de hierro, realizando ejercicio físico.
¿En qué puede ayudar el juego a tu hijo?
El juego potencia la sociabilidad y la actividad de relacionarse con los demás y desde hace muchos siglos los niños aprenden jugando.
Ayuda a tu hijo a descubrir el entorno que le rodea y a aclimatarse a éste. Esto es así porque con el juego, los niños inventan y producen mecanismos para adaptarse a ese momento y actuar con la mayor facilidad.
Desarrolla la imaginación y la creatividad ¿Quién no se ha creído un superhéroe de los cómics? Pues bien, a través de esta imaginación los niños desarrollan su creatividad, característica que les ayudará dentro del ámbito escolar.
Potencia la memoria, la concentración o la atención. Hay juegos que precisan de estas virtudes para poder llevarse a cabo así que a través de ellos las estarán desarrollando.
Los prepara para seguir las normas. Cuando se está jugando, el niño debe respetar una serie de reglas si quiere que todo salga bien, pues este pequeño acto tiene una gran repercusión en el pequeño que aprende que, si quieres conseguir algo, tienes que hacer las cosas bien.
A través del juego, tu hijo aprenderá a superar sus miedos a conseguir sus objetivos y a experimentar tanto el dulce sabor de la victoria como el amargo de la derrota.